Menúpodcast

Fecha de publicación

Negligencia médica: cómo casi me matan por tener prostatitis

El tema de hoy es especial. Por un lado, la conocen muchos de primera mano. A juzgar por las estadísticas, cada año las cosas empeoran y la edad promedio de los pacientes ataca a gente más joven. Y por otro lado, pocas personas comienzan una conversación con su cuate con la frase: "Hola, tengo prostatitis". Los hombres no tienen a nadie con quien discutir esto e intercambiar experiencias. Pero tal vez eso es lo que voy a hacer hoy, compartir mi historia.

En este artículo se enterarán de cómo me enfrenté a la prostatitis, perdí mi trabajo y casi me divorcio. Y sobre cómo me deshice de esta enfermedad para siempre.

Muy temprano

Tenía 34 años. No esperaba que sucediera tan pronto. En ese momento tenía conocidos con prostatitis, pero ambos tenían más de 50 años.

Todo comenzó cuando empecé a sentir dolores en la ingle, venían por oleadas. Pronto le siguió un dolor cortante desagradable y ardor al miccionar. Me pasaba más a menudo después del sexo, así que sospeché que tenía una infección. Por cierto, no engañé a mi esposa con nadie, así que no sabía qué pensar. Decidí no atormentarme con las dudas, sino ir al médico y revisarme.

El médico me escuchó, pidió que me hicieran pruebas y luego me diagnosticaron prostatitis.

Me recetaron varios medicamentos que se tomaban por días específicos. Los bebía todo según lo acordado, pero no notaba mejoras especiales. A veces la incomodidad casi desaparecía, pero volvía, y cada vez la sentía más fuerte que la anterior.

Fui al médico enojado. Un mes de tratamiento no dio absolutamente ningún resultado, solo me empeoré. Por supuesto, no me peleé con el médico, pero le hice saber que me tomaba la situación en serio y no me dejaría envenenarme con pastillas hasta que la billetera estuviera vacía.

Él, a su vez, me miró raro y me mandó a hacerme los análisis. Clamidia, tricomonas, Ureaplasma, micoplasma , esta vez me los había hecho todos. ¿Y qué creen? Me recetaron un montón de medicamentos de nuevo y me mandaron a casa.

Mientras, la prostatitis comenzaba a tener un impacto mayor en mi vida.

Qué es vivir con prostatitis

Comencé a ir al baño con más frecuencia, a veces cinco veces por hora, cada vez que iba sentía dificultad para miccionar y dolor. Eso hizo que la calidad de mi sueño se afectara seriamente, me cansaba más rápido durante el día. Todo esto, por supuesto, me afectó anímicamente.

Un día después de otra noche de insomnio cometí un error en el trabajo. Ese día no paré de sentir esa sensación horrible de querer ir al baño como una persona normal, pero no puedes. Me iba del trabajo a veces, pero aun así no podía. De vuelta en mi oficina después de otra visita al baño, encontré a mi jefe allí.

Estaba parado, recostado contra mi escritorio y miró el reloj. Cuando me acerqué, me dijo bastante seco que quería hablar conmigo sobre mi reciente error de cálculo. Durante esta mañana, entró a mi oficina 4 veces y solo ahora me vio que estaba en mi lugar de trabajo. Terminó brevemente: "Espero tu carta de renuncia hoy en la noche".

Confundido y afectado, dejé la empresa. Estoy seguro de que es una historia de despido tan cómica que aún no has escuchado.

En casa las cosas no estaban bien tampoco. En ese momento, mi esposa y yo realmente queríamos tener un hijo, por eso mi despido la puso tan triste. Y a pesar de tomar numerosas píldoras, comencé a tener problemas en el campo sexual. Y junto llegaron los reclamos y peleas.

Todo esto se acumulaba y cada mes la enfermedad me estaba quitando más y más. Pero lo peor estaba por venir.

Cáncer de próstata

Después de un segundo tratamiento de medicamentos, la enfermedad retrocedió por un tiempo. Al menos no sentía su presencia. Pero parece que al final todos mis esfuerzos fueron en vano. Cuando volvieron los síntomas, fui al médico nuevamente. Me enviaron a un examen completo. Y una semana después, descubrí que el cáncer de próstata se había.

En México ocupa el puesto 10 en el Top de causas de mortalidad masculina. Pueden imaginarse en que pesadilla me encontraba. Y también estaba terriblemente enojado: mi médico era un pendejo, pero lo noté demasiado tarde.

Me dolía casi todo el tiempo. Dormía, comía, vivía con esas sensaciones. Y en ese momento no entendía por completo qué podía hacer después.

Un tratamiento real

Para ese momento, ya no esperaba el apoyo de los demás. A pocas personas puedes hablarle de la prostatitis y la relación con mi esposa se puso bastante tensa. Pero ella decidió ayudarme.

Mi esposa le sacó toda la información a su amiga, que trabajaba como contable en una clínica privada. Ella nos aconsejó ver a un médico. La entrada para él estaba con un mes de anticipación y no sabía si podía permitirme sentarme y esperar. Pero al final hice caso y agaché la cabeza.

Esta fue la más corta de mis visitas al médico. El especialista apenas miró mis pruebas y la historia médica, luego me escribió la receta y me envió a la caja. No tomó más de cinco minutos. Salí de la oficina, pagué la consulta y las pastillas. Llegué muy confundido a casa y comencé a tomar el remedio según las instrucciones.

El remedio se llama Erasmin

Cómo ocurrió todo

  • A los tres días yo noté que el dolor desaparecía al menos por la noche. Poder dormir tranquilamente influyó seriamente mi bienestar.
  • Después de una semana, me era más fácil ir al baño. Al principio, se fue el dolor irritante y luego gradualmente tuve una sensación de que "no es todo aún".
  • Después de tomar el remedio un mes, habían desaparecido casi todos los síntomas. Al menos los que provocaban dolor.
  • Poco a poco también volvió a la normalidad la potencia. Tomó más tiempo que cualquier otra cosa, pero aun así mejoró.

Visité a ese médico una vez más. Afirmó que no tenía cáncer, era una neoplasia benigna, más conocida como adenoma. Como resultado, mi tratamiento tomó 2,5 meses.

Me preguntaba exactamente qué me habían tratado y decidí encontrar tanta información como fuera posible. Resultó que Erasmin se podía obtener mucho más barato de lo que se vendía en esa clínica privada. En México, se puede pedir en el sitio web oficial del fabricante, no tienes que ir a algún lugar. En serio, lo traen literalmente a tu casa. Por cierto, hasta el tiene descuento del 50% el remedio

Pues bueno, acá les comparto el enlace al sitio oficial. Espero que nadie tenga que enfrentarse a la negligencia y la codicia de los médicos que yo me he encontrado. Y deseo buena salud y la misma relación.

39EUR

78EUR

Comentarios:
José Loredo
30.06.2022
Pues que tuviste mucha suerte de que no haya llegado a ser cáncer de próstata. Es algo terrible, no puedes dejar que llegue a la enfermedad.
Claudia Barros
01.07.2022
Definitivamente se lo ordenaré a mi esposo. ¡No puedo dejar ir esta chance!
Augusto Alvarado
02.07.2022
Me he venido tratando la prostatitis durante más de un año. Parece que no pudieses deshacerte de ese mal caray. Erasmin sí que es mi última esperanza.
Miguel Tovar
02.07.2022
Entiendo mucho al autor. La prostatitis no solo puede afectar la salud, sino que también puede causar depresión.
Fabio Aguilar
03.07.2022
Todos estos médicos solo quieren sacarnos la lana. Y especialmente esto va para aquellos que trabajan en clínicas privadas. Ellos reciben todos comisiones por ventas.
Andrea Báez
04.07.2022
Mi esposo tomó este Erasmin hace aproximadamente un año, no se quejó más de prostatitis.
Lucho Tabio
05.07.2022
Así es como pasa. Primero nos meten antibióticos y viagra, y luego se sorprenden de que nada funcione.
Raúl Ferro
06.07.2022
Ya lo ordené. Me devolvieron la llamada, me comentaron todo en detalle. Después de 3 días ya lo tendré y se paga al recibirlo. Comodísimo.
Carlos Romero
06.07.2022
Yo mismo estuve tomando este remedio. Literalmente, en un mes, todo pasó, incluso el urólogo estaba en shock. ¡Eso es genial!
Roberto Elbas
07.07.2022
ya he oído hablar de Erasmin. Dicen que realmente ayuda, y no tienes más recaídas.